jueves, 27 de septiembre de 2012

Haz copias de seguridad de tus fotos


La era digital nos ha traído a los fotógrafos muchas comodidades, pero también algunas incomodidades con las cuales hay que lidiar si no queremos que todas nuestras fotos acaben perdidas.
Uno de los grandes problemas que tenemos es la gran cantidad de fotografías que realizamos y guardamos. Hoy en día cualquier fotógrafo aficionado puede hacer en un año la misma cantidad de fotografías que las que hicieron grandes maestros de la fotografía durante toda su vida. Y otro de los problemas al que tenemos que enfrentarnos es que ya las fotografías no las tenemos físicamente en nuestras manos, sino que tenemos una gran cantidad de 0 y 1 guardados en nuestro disco duro.

La pérdida de datos digitales es uno de los problemas más importantes que la gente me suele comentar. El problema es que la gente se da cuenta de la importancia solo después de que haya ocurrido el desastre. Es como antiguamente, la gente no se ponía el cinturón de seguridad hasta que tenía un accidente y se daba cuenta de la importancia del mismo.


Hoy en día, y gracias a los precios de los discos duros, es imperdonable que cualquier persona no tenga como mínimo una copia de seguridad de sus fotos, que si bien tiene su importancia a nivel profesional, son irremplazables a nivel personal, ya que nunca más podrás tomar esa fotografía de tu hijo jugando en la playa cuando era niño.

 

Aquí voy a explicar cómo realizo yo mis copias de seguridad. Es un método que he estado utilizando desde hace varios años con muy buenos resultados. 

Ante todo, un método de copia de seguridad de nuestras fotos (aplicable también a cualquier archivo informático) tiene que cumplir dos objetivos: ser realmente efectivo y que sea fácil de aplicar, ya que un método engorroso hace que con el paso del tiempo cada vez tengamos menos ganas de hacerlo llegando a no hacer copias de seguridad en meses. 

Antiguamente utilizaba copias de las fotos originales en DVD. Pero este método tiene dos grandes problemas. El primero de ellos es la degradación física de los discos, de lo que no te dabas cuenta hasta que no intentabas recuperar información de un disco inservible (ya que nadie revisa cada 6 meses si nuestros DVD se están degradando o no). El segundo gran problema que genera este método es que no se guardan las modificaciones realizadas a las fotos con posterioridad, o si las guardas, tendrás la misma foto con acabados distintos en discos distintos que te generará un gran dolor de cabeza a la hora de buscar una foto antigua.



Actualmente mi flujo de trabajo es el siguiente:
-Descargo mis fotos en el ordenador en una carpeta de “fotos originales”.
-Proceso las fotos en Lightroom y/o Photoshop y las exportaciones que realice las guardo en otra carpeta.
-Cada cierto tiempo utilizo un programa de sincronización de archivos para hacer copias a un disco duro externo. Incluyo la carpeta de “fotos originales”, la de “exportación de fotos” y todas aquellas carpetas que tienen archivos que no me gustaría perder.



Consideraciones.
Utilizo un programa de sincronización de archivos (FreeFileSync, que es gratuito y fácil de usar) en vez de copiar a lo bestia las fotos ya que este tipo de programas lo que hace es comparar la carpeta de origen y la de destino copiando solo los archivos que son nuevos o los que se han modificado (compara la fecha de creación de los archivos y el tamaño de los mismos, si hay alguna modificación lo copia en el disco de seguridad y borra el antiguo). Esto agiliza mucho las copias de seguridad ya que solo copia lo nuevo o modificado sin volver a copiar lo anteriormente copiado. Actualmente entre fotos y archivos realizo copias de seguridad de más de 300Gb, si esto lo copiase en su totalidad, cada copia de seguridad me llevaría horas (sobre todo si es por puerto usb).



La capacidad del disco duro a utilizar deberá ser como mínimo del doble del tamaño de las carpetas a guardar. Un disco duro debe tener al menos un 20-25% de espacio libre para que no se ralentice la copia de archivos. Duplicando el tamaño del espacio que vamos a utilizar nos aseguramos que el disco duro podrá absorber el aumento de nuestro número de fotos sin llegar a sobrepasar ese porcentaje de espacio libre. Si somos de los que no borramos ninguna de las fotos que hacemos o somos de los que se nos queda el dedo pegado al disparador tendremos que plantearnos tener un disco duro mayor o tener más de un disco duro y en cada uno de ellos realizar una copia parcial de nuestros archivos.



El disco utilizado para copias de seguridad solo debe estar conectado al ordenador durante la realización de la copia y después desconectarlo y guardarlo (y solo utilizarlo para copias de seguridad). De esta manera nos aseguramos que si el ordenador es infectado por un virus o hay una subida de tensión nuestra copia de seguridad no se verá afectada. De igual manera al utilizar este disco solo para copias de seguridad minimizamos la posibilidad de que esto ocurra ya que estará conectado solo lo imprescindible. Por supuesto este disco no se conecta a otro ordenador que no sea el mismo y del cual tenga el control completo de que el antivirus y el cortafuegos están actualizados.

Es importante la forma de conectar el disco duro al ordenador ya que ello implicará que una copia tarde en realizarse minutos o horas. La conexión más rápida actualmente para discos externos es una conexión e-sata (pero los discos duros son más difíciles de encontrar y más caros y no todos los ordenadores tienen esa conexión). También se puede utilizar una carcasa extraíble donde se instala un disco duro normal y se introduce a la hora de hacer la copia de seguridad y una vez terminada se extrae. La otra opción más económica y fácil de implementar es conectarlo por USB. Si es un disco y un puerto usb 3.0 la velocidad es rápida, pero si es un puerto usb 2.0 la copia puede ser interminable.
Ya depende de cada uno el decidir cada cuanto debe hacer su copia de seguridad y dependerá de la importancia que tengan esas fotos y la velocidad con que nuestro catálogo aumenta.


Si se quiere tener una protección extra se pueden hacer tantas copias como se desee solo falta perder cinco minutos en configurar el programa de sincronización y poder hacer tantas copias de seguridad como se quiera. Personalmente tengo dos copias de seguridad, una de ellas conectada al ordenador de manera continua (con la que me protejo de una pérdida accidental y de un fallo del disco duro principal de mi ordenador) y una segunda copia que está siempre DESCONECTADA del ordenador (protegiendo de esta manera mis fotos de virus y subidas de tensión de la red eléctrica).

La verdad es que podeis pensar que soy excesivo pero tengo una tercera copia de seguridad que actualizo una o dos veces al año, la cual guardo en casa de mis padres ya que nadie está a salvo de un incendio o de un robo en la casa.


Un flashazo para todos.


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